Paraguas decorados, belleza bajo la lluvia

Paraguas decorados

Imaginad un día de lluvia, en el que el cielo y el asfalto confunden su color.

El tráfico es horrible y llegáis tarde, lo brumoso de la jornada parece que se  contagia al estado de ánimo. Corréis intentando que los charcos no os pongan perdidos… y entonces, a lo lejos, divisáis una pequeña obra de arte, un paraguas pintado, en el que el color y la imaginación son las dulces notas que atraen vuestra vista y consiguen que ese momento se cargue de belleza.

¿Cómo decorar tu paraguas?

Si estáis hartos de los clásicos paraguas monótonos, sobrios y aburridos, podéis echar mano de vuestra imaginación para decorar y personalizar este objeto que de tantos incómodos momentos nos salva. Y no hace falta que seáis unos manitas ni unos artistas en potencia. Sólo con ganas y entusiasmo, podéis conseguir un resultado estupendo.

Sólo necesitaremos:

Un paraguas de nylon (si es de un color claro, mejor), pinceles y pintura impermeable permanente.

El procedimiento para pintarlo es prácticamente el mismo que utilizaríamos para un lienzo, una pared o un simple papel. Eso sí, hay dos cosas básicas. La primera, que hemos de estar seguros de que nuestro paraguas está bien limpio y seco, para que la pintura quede perfectamente adherida.Y, lo segundo, que hemos de tener cuidado para fijar la posición de nuestro paraguas abierto de forma que nos resulte cómodo de pintar. Lo ideal es colocarlo en vertical y sujetar firmemente su mango, “aprisionándolo” entre dos objetos para que mantenga su posición y no se mueva.

Si no sois especialmente duchos en el arte del dibujo, podéis elegir formas geométricas o abstractas para decorar el paraguas. O también, copiar un dibujo que os guste sobre cartón duro, para usarlo como plantilla. Como sea, os ayudará si primero marcáis el boceto del dibujo con tiza, sobre la tela del paraguas. Esto os permitirá borrar las líneas si os habéis equivocado o si el resultado no os parece adecuado.

Y nada, ¡ya estamos listos para pintar! Un consejo para que os quede de lujo es empezar por las formas más pequeñas, delineándolas primero y rellenando después. Una vez hayáis acabado, esperad tres o cuatro días para empezar a usarlo.

Aquí tenéis algunos paraguas decorados muy fáciles de copiar, para que os animéis a intentarlo:

Un bonito color de fondo conseguirá que prácticamente cualquier dibujo transforme el paraguas en un precioso conjunto, por simple que sea el diseño.

Decorar nuestros objetos por nosotros mismos, no sólo aviva nuestra imaginación y enriquece nuestra mente, sino que ayuda a que valoremos más aquello que nos rodea y a apreciar las pequeñas cosas.

Animaos a hacer esta manualidad con niños, os sorprenderá lo fácil y divertido que resulta. Eso sí, ¡vestidles antes con un impermeable para que no se manchen la ropa!

Paraguas originales

Y, ahora, un pequeño disfrute visual, algo que no está al alcance de cualquier pintor. Si queréis de verdad destacar por lo original de vuestro paraguas, en el mercado podéis encontrar muchos modelos que os dejarán con la boca abierta, por lo precioso de sus estampados.

Estos dos angelitos de Rafael se han convertido en un icono de moda que podemos encontrar en muchos objetos comerciales. ¿Cómo iban a faltar entonces en algo tan vistoso y llamativo como puede ser un paraguas?

Estáis en Londres, no sabéis cómo localizar esa cafetería tan estupenda que se cita en las guías y, encima, se pone a llover. Tranquilos, con este paraguas-mapa de Londres, conseguiréis solucionar ambos problemas.

Y, si sois amantes de las costelaciones, aquí os presentamos otro modelo de paraguas que pone el universo a vuestros pies, o, mejor dicho, sobre vuestras cabezas 🙂

CASAS PREFABRICADAS EN ESPAÑA - LISTADO DE EMPRESAS

X
Salir de la versión móvil