Hoy nos centraremos en la reforma de la cocina; concretamente te vamos a dar algunas pautas para que puedas llevarla a cabo tú mismo y crear tu propia cocina de obra paso a paso. Ahorraremos algo de dinero y además conseguiremos tener una cocina de lo más personalizada que no dejarán indiferente a nadie.
Convertir la cocina en nuestro laboratorio personal es un reto para los amantes del diseño. Podrás confeccionar cada milímetro de la cocina, cada mueble y cada detalle para ajustarlo, no solo a tus necesidades, sino también a tu gusto personal y desarrollar todo tu talento en una cocina única en la que sentirnos a gusto. Las cocinas de obra ofrecen un sinfín de posibilidades como la combinación de materiales, muebles originales, revestimientos, suelos, accesorios como cortinas y lámparas…
¿Qué son las cocinas de obra?
Al contrario que las cocinas tradicionales, las cocinas de obra destacan por poder construir la cocina de tus sueños, con tu propio estilo, con la combinación de materiales que te gusten y con con un diseño de muebles totalmente diferente. En definitiva, una cocina que se aleja de lo convencional y lo estándar.
Una cocina de obra se caracteriza por poder construirla a medida en el espacio disponible, ya que se ajusta a la perfección a los metros de tu cocina, por lo que tendrás una cocina y muy original.
Ventajas de contar con una cocina de obra en casa
1. Son económicas
Las cocinas de obra suelen ser más económicas que otras, y además, a la hora de poder disponer de ellas, tardan mucho menos que las prefabricadas, ya que estas hay que pedirlas con bastante antelación.
2. Son resistentes
Las cocinas de obras son más resistentes de lo que nos podamos imaginar, lo que nos asegura una gran durabilidad a lo largo del tiempo manteniendo sus condiciones óptimas.
3. Se pueden personalizar totalmente
Si piensas que con las cocinas de obra no tienes muchas opciones, te equivocas. Puedes elegir la distribución que más se adapte a tus necesidades, y además, tanto las puertas como los cajones pueden ser del material que más te guste, aunque nosotros te recomendamos la madera. Y en el caso de que no desees ni puertas ni cajones, siempre puedes poner unas cortinas monas que oculten el interior de los compartimentos.
Lo cierto es que el mobiliario de obra trae consigo muchas más ventajas que inconvenientes, como por ejemplo que su construcción se hace sobre espacio con el que ya contamos, con lo que podemos aprovechar hasta el último milímetro para trabajar en él. De este modo, podemos crear, en la mayoría de los casos, formas ilimitadas que se ajusten a lo que necesitamos, o lo que es lo mismo, una cocina de diseño a medida, ya sea grande o pequeña.
Pasos para construir tu propia cocina de obra
- En primer lugar debemos tomar las medidas exactas de la vitrocerámica, fregadero, y en su caso, calentador de gas. De este modo, estas medidas serán descontadas posteriormente del largo de la encimera.
- Para asegurarnos una correcta construcción de nuestras cocinas de obra, pondremos una fila de ladrillos sin cementar para señalar estas zonas donde irán ubicados la vitrocerámica y el fregadero. Trazaremos el ancho que tendrá el fregadero y dejaremos además diez centímetros aproximadamente a cada lado en cuestión.
- El tercer paso será la construcción de los tabiques utilizando el correspondiente cemento.
- Ubicaremos los premarcos en la parte delantera de la cocina donde colocaremos las puertas de la misma. En el interior de las cocinas de obra podemos colocar estanterías, lo cual nos ayudará mucho en cuanto a organización en el futuro.
- Elegiremos los azulejos y la encimera. Existen muchos colores y materiales de gran dureza y todo tipo de ladrillos visto para crear diferentes estilos.
- Finalmente colocaremos el desagüe del fregadero. En el caso de que no estemos muy seguros de poder hacerlo bien, dejaremos este paso en manos de profesionales.
¿Qué es lo que no debe de faltar en una cocina de obra?
- Madera. La reina indiscutible en toda cocina de obra. Desde vigas hasta muebles, podemos combinar este material con otros como el microcemento o la cal para darle un aire más actual.
- Muebles de obra. No puede haber cocina de obra sin muebles de obra. Nos evocan a los estilos más tradicionales de las casas de pueblo.
- Armarios sin puertas. No hay nada que esconder y sí mucho que enseñar. Mostremos el interior para ganar en profundidad y tu cocina parecerá mucho más grande.
- Fibras naturales. Sí, fibras con sabor a campo como recipientes para la fruta, cestas, alfombras o taburetes.
- Color, mucho color. Si la cocina de obra representa el estilo más campestre, no hay lugar tan colorido como el campo, las sillas de colores, los estampados… El color nos hará libres.
- Fregaderos de pueblo. Daremos un estilo único a nuestra cocina, de piedra o mármol, acompañado de griferías con un look más antiguo.
- Elementos decorativos traídos del pasado. Son piezas que darán un encanto especial a tu cocina, vajillas, alacenas, sillas…
- ¿Qué haríamos sin el hierro o el cobre? Son dos magníficos metales que lucirán acompañados de otros elementos como la madera, la cerámica, la piedra o el barro. Cada detalle de estos dos preciados metales harán lucir tu cocina tan simple como unas latas sobre una balda o una cazuela colgada.
¿Es posible construir una cocina de obra barata?
Si estás pensando renovar tu cocina y tener una cocina más original que una estandarizada y con mucho encanto, una cocina de obra es la mejor opción para darle un estilo más personal.
Es posible que pienses que una cocina de obra sea mucho más cara que una tradicional, pero nada más lejos de la realidad. Al poder contar con una cocina de obra económica a medida, tú decides el presupuesto para adaptarla a tu bolsillo, pero también a tus necesidades.
Al final, cuando construyes tu propia cocina paso a paso, tú decides cómo la quieres y cuál es tu límite. Existen muchos elementos en los que puedes ahorrar: materiales, baldas, electrodomésticos, utensilios, entre otros; sin que ello afecte al resultado final.
Lo ideal es dibujar en un papel la distribución de tu cocina, delimitando las zonas del fregadero, la vitrocerámica o los tabiques, con todos los elementos necesarios. Después podrás reunirte con un profesional para terminar de dar los últimos retoques y que este te oriente y aconseje en los aspectos que tengan que ver con la obra, materiales y fontanería. Entre los dos podréis decidir un presupuesto que se ajuste a tus necesidades sin que el resultado final se vea afectado.
COCINAS RÚSTICAS Y MODERNAS
Las cocinas de obra son un clásico en todo tipo de viviendas rústicas. Aun así, este tipo de cocinas admite un toque de modernidad o estilo colonial e, incluso, industrial y ecléctico.
COCINAS DE OBRA TRADICIONALES
Las casas de estilo tradicional son cada vez más una tendencia dentro del interiorismo y la decoración. Seguro que has estado alguna vez en una de estas cocinas, como las de las casas de las abuelas o las de algún pueblo blanco andaluz o de estilo mediterráneo.
COCINAS DE OBRA MINIMALISTAS
Con poco dicen mucho. Son cocinas tradicionales con pocos elementos pero muy bien aprovechadas, con un diseño bastante sencillo pero armonioso.
COCINAS DE OBRA DE ESTILO INDUSTRIAL
Cocinas tradicionales que combinan muy bien con elementos de modernidad y el ladrillo visto en paredes, que contrasta con materiales más fríos como la pizarra, el metal y el cobre o la piedra, y la última tecnología.
Y tú, ¿prefieres las cocinas de obra o las cocinas prefabricadas?
Estoy super ilusionada pues mi futura cocina será de obra,me parecen super bonitas y con mucha más personalidad que las prefabricadas 🙂
He estado explorando un poco por artículos de alta calidad o entradas en blogs sobre estos contenidos. Explorando en Google por fin encontré este blog. Con lectura de esta información, estoy convencido que he encontrado lo que estaba buscando o al menos tengo esa extraña sensacion, he descubierto exactamente lo que necesitaba. ¡Por supuesto voy hacer que no se olvide este blog y recomendarlo, os pienso visitar regularmente.
Saludos